Como lo prometido es deuda, hoy te traigo una información que te va a encantar, pero, sobre todo, te va a facilitar la vida mogollón.
¿Recuerdas que te hablé sobre la cosmética natural y ecológica en este artículo? Bueno, pues como sé que no todo el mundo tiene un máster en ingredientes cosméticos para poder leer un INCI con soltura… ¡Y no acabar con dolor de cabeza!, hoy quiero compartir una herramienta que me parece esencial para poder valorar si lo que vas a comprar es auténtica cosmética natural o no: los sellos ecológicos. Sí, esos pequeños guardianes que nos aseguran que lo que compramos es, de verdad, cosmética natural. Porque, vamos, nadie quiere que le den gato por liebre.
Pero ojo, no cualquier sello es “fiable”. Así que hoy os voy a hablarte de uno en particular, el sello con el que certificamos nuestros productos de Biovidasana. ¿Por qué me fío de ellos? Aquí os cuento.
Las certificadoras, como Biovidasana, son esas maravillosas empresas que se encargan de verificar que las marcas hagan lo que dicen. ¿Cómo? Pues sometiéndose a rigurosas inspecciones anuales que revisan todo, desde la compra de ingredientes hasta que el producto terminado llega a tus manos. Facturas, procesos de fabricación, etiquetado… todo pasa por su lupa.
Y aquí viene lo bueno de Biovidasana:
Creen en lo que hacen. Son un equipo motivado, inspirado, con muchos años de trabajo a sus espaldas y llenos de ganas de seguir haciendo las cosas bien.
Realizan rigurosas inspecciones, orientadas a comprobar que lo que dice el etiquetado del producto es verdad. Y, para eso, someten los productos a varias pruebas a fin de verificarlo.
Exigen certificados que aseguren la transparencia de los proveedores, incluyendo aquí la procedencia del producto, el certificado de ser libre de transgénicos, el modo de extracción…
Sin ambigüedades, exigen información clara para evitar el greenwashing. Certifican también que los ingredientes que usamos no contienen ingredientes transgénicos o nanopartículas, que los ingredientes presentes en el producto no han sido irradiados y que los productos se han producido sin contaminar ni dañar el medio ambiente.
Revisan también los métodos y procesos llevados a cabo en el laboratorio y proponen cambios más sostenibles cuando ven que algo se puede mejorar.
Normas Exigentes: Minimizan el uso de químicos y verifican que no sean dañinos.
Además, otorgan el distintivo EcoPlus a aquellas marcas que hacen una apuesta clara por lo ecológico: más del 80% de sus productos están certificados en categoría I y no fabrican en convencional ningún producto.
Y… ¡S!, Naturavia tiene el distintivo EcoPlus. Así que cuando veas estos logos en nuestros productos, sabrás que estás eligiendo lo mejor para ti y para el planeta.
¿Cómo lo reconocerás estos certificados ecológicos en los envases de cosmética?
¡Te los enseño a continuación y te cuento, exactamente, qué significa cada uno! En los distintos productos, podrás encontrar alguno de estos logos, que son todos de Biovidasana.
Cosmética con un 90% de ingredientes ecológicos para la categoría I; y entre el 15-89% para la categoría II (producto cosmético ecológico o natural con un % de ingredientes ecológicos).
Empresas con el 80% de sus productos en la categoría I (cosmética ecológica) y que no producen cosmética convencional bajo otras marcas.
Producto cosmético natural con menos de un 15% de ingredientes ecológicos o sin ingredientes ecológicos.
Cosmética certificada sin ingredientes de origen animal.
Productos con el Aval BioVidaSana, sin la certificación bio.inspecta
Finalmente, Biovidasana no solo es una norma nacional accesible para pequeñas empresas, sino que también representa proyectos artesanos y un fuerte compromiso con el desarrollo rural. Todo esto respaldado por la Asociación Vida Sana, una entidad sin ánimo de lucro con gran trayectoria en promover la agricultura ecológica y el consumo responsable.
¿Quieres saber más? Echa un vistazo a todo lo que Biovidasana tiene para ofrecerte aquí.
¡Espero que te haya resultado tan interesante como a mí! Nos leemos pronto.